VALERIA EN EL ESPEJO
ELISABET BENAVENT
Editorial Suma (2014)
Parte: 2 de 4 (Serie Valeria)
Páginas: 448
Precio: 17 €
⚠️Esta reseña contiene algún spoiler⚠️
¡Hola, hola! Como Netflix anunció que esta serie de libros iba a convertirse en serie próximamente y llevaba años con ellos pendientes, pues me animé a leerlos. No sé si he sido yo, la autora, o la situación de la cuarentena pero vaya decepción con esta segunda parte.
Valeria está inmersa en una vorágine emocional. Valeria acaba de publicar su novela y tiene miedo a las críticas. Valeria se está divorciando de Adrián y no es fácil. Valeria no sabe si quiere tener una relación con Víctor. Y mientras Valeria teme, llora, sueña. Lola no sabe qué hacer con Sergio, se siente sola. Carmen se ha despedido y lucha por comprender a Borja, su novio y antiguo compañero de trabajo. Y Nerea se levanta cada mañana con náuseas.
Hace mucho tiempo que no subía al blog una reseña con spoilers, ya que normalmente suelo ser cuidadosa con esto y sólo lo hago cuando un libro me indigna de verdad, como es el caso. La verdad que no entiendo qué ha pasado, como sabéis al anterior libro le dí un 5 de 5 y pensé que esté sería igual o que a lo mejor flojeara un poco pero no a estos niveles. La verdad, que me he planteado muchas veces abandonar el libro y si le doy esta nota no es por la trama de Valeria sino por la de sus amigas que creo que han salvado la historia. Así que, sin más rodeos, comenzamos.
Primero. La relación de Víctor y Valeria en este libro me ha parecido un poco absurda. Entiendo que ella pueda tener mil inseguridades por su situación y que no se fie mucho de Víctor al ser el típico hombre guapo y mujeriego, pero no he visto ningún tipo de evolución en su relación más allá del sexo. Claro que el sexo en una relación es importante, pero no he visto un desarrollo o una mejora en cuanto a sentimientos y en cuanto a ambos como pareja y creo que en una relación es importante estar los dos en el mismo punto, saber lo que se quiere y lo que no, hablar las cosas y mejorar día a día, además de por supuesto compenetrarse mutuamente y tener confianza. Cosa que en ellos dos no he visto.
Segundo. El comportamiento de Valeria durante este libro no lo he entendido desde la primera página. Pide a Víctor más cosas de las que este puede ofrecer y siempre le está culpando cuando primero es ella la que tiene que aclarar el tema del divorcio con Adrián y firmar los papeles para poder empezar otra relación y que sea sana y duradera en el tiempo. Víctor le demuestra una y otra vez (aunque sea un tópico) que de verdad puede cambiar por ella y dejar atrás su lado mujeriego y aún así, Valeria tiene comportamientos de niña de 15 años cuando tiene 28.
Tercero. No miento si digo que me he alegrado mucho cuando Víctor ha mandado de paseo a Valeria y le ha dicho que no puede tener nada serio con ella. ¡Olé, olé y más olé! ¿Cómo se puede tener algo serio con una persona que no expresa lo que siente? Cuando algo va mal Valeria se encierra en vez de tener confianza y soltárselo a Víctor para arreglarlo. Además como se va a tener algo serio con una persona que no se aclara ni ella misma. Por no hablar del comportamiento tóxico de Valeria capítulo tras capítulo. Un párrafo que me marcó mucho fue el siguiente:
“Hombre, antes no tendrías ningún problema, pero si esperas que esto llegue a formalizarse y que nos llamemos novios, olvidate de que otra elija la ropa de la cama en la que me voy a acostar contigo”
¿PERDÓN? ¿Vosotros también estáis flipando no? Osea me fastidia muchísimo este tipo de comentarios porque además son pensamientos de Valeria que no expresa en voz alta, se los guarda para ella y de verdad no me ha podido parecer más repugnante leer este tipo de frases. ¿Desde cuando una mujer por mucho ex rollo o lo que sea de tu novio no puede tener una relación cordial con él? Y esto es solo un ejemplo, porque joyitas como estas aparecen durante todos los capítulos o en la mayoría donde aparece Valeria.
Cuarto. Harta de que siempre sea Víctor el que tenga que ir detrás de ella pidiendo perdón aunque él no tenga la culpa. Harta de que Valeria aunque admita que está enamorada siempre tenga que ser el chico el que tenga que estar esperándola en el coche, llamándola al móvil cuando se pilla una rabieta porque es demasiado orgullosa para dar el paso ella misma y admitir sus errores y mantener una conversación de adultos.
Quinto. Me parece una fantasía las tramas de Nerea, Carmen y Lola. No todo en este libro ha sido malo la verdad. Lo de Nerea no me lo esperaba para nada y de verdad que me ha parecido una mujer súper valiente con una evolución muy importante durante estos dos libros. Carmen y Borja me han ganado mucho más en esta segunda entrega y dios, que final tan bonito han tenido. Y Lola aunque es la que menos me gusta junto con Valeria, en este libro me ha parecido que ha tenido un poco de evolución así que guay.
En fin, como bien he dicho antes, decepción. Por un lado quiero leerme el siguiente para saber qué pasa con el resto de chicas porque sinceramente para mí la historia de Valeria y Víctor empezó en el primer libro y ahí se ha quedado. Pero por otro no quiero continuar porque tenía muchas esperanzas puestas y como veis no ha ido muy bien. No se lo que haré, pero creo que necesito un respiro con estos libros porque es una pena que este libro haya flojeado tanto porque como os decía al principio, el primero me enamoró.
Puntuación: 3/5
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